Paradójicamente, el municipio más lejano de la capital, representa el mayor número de intervenciones acometidas por el Centro en el campo de los Archivos Parroquiales, siendo ya 4 los Libros de Bautismos restaurados pertenecientes al Archivo Parroquial de la Iglesia de la Luz de Santo Domingo de Garafía, con registros que abarcan desde 1560 a 1762.
Con diferentes grados de deterioro, pero todos con importantes causas de alteración, cada uno de ellos necesitó de un estudio minucioso para poder diagnosticar su proceso de restauración adecuado.
Como dato anecdótico, estos libros habían sido restaurados en 1912 por Angel Serra Gortina, conservando una nota sobre estas intervenciones en cada libro, entendidas con distinto criterio al actual, pero con muy buenas intenciones (teniendo en cuenta los medios y conocimientos disponibles), basándose en un parcheado generalizado de los bordes deteriorados de las hojas. Estas primeras intervenciones se respetaron por el valor histórico añadido que imprimen a las obras, pero quedando relegadas a un segundo plano para poder dar lectura y uso a los libros en lo que debía ser su formato original.